2� FASE. MODELO DESOLLADO. CURSO 98-99.
RESUMEN
"R�plica Anat�mica de Disecciones para la Ense�anza".
Tras el �xito de la primera fase, premio a la mejor innovaci�n 1998, hemos desarrollado la segunda consistente en una nueva disecci�n del miembro superior y colorear todas r�plicas anat�micas de disecciones realizadas en la Facultad de Medicina. Una vez coloreadas, y disponiendo de la r�plicas en el aula, se inici� el proyecto de recuperar para la Facultad de Bellas Artes una obra de arte de indudable valor pedag�gico y anat�mico: El Crucificado desollado del Profesor Doctor D. Juan Manuel Mi�arro L�pez, perteneciente al patrimonio art�stico de nuestra Universidad, y que previa solicitud al autor y Vicerrector, conseguimos la autorizaci�n para reproducirlo. Se ampl�a as� el material did�ctico iniciado en la anterior convocatoria, que complementa en la Facultad de Bellas Artes la comprensi�n anat�mica del modelo vivo. Han prestado su colaboraci�n en este proyecto nuevos profesores y alumnos, a los que como coordinador quiero dar las gracias y dedicarles mi trabajo.
Profesor Doctor Antonio Bautista Dur�n. Sevilla 1999.
ABSTRACT
"Anatomical Dissections Reply for the Teaching".
After the success of the first phase, premium to the better innovation 1998, we have developed the second consistent in a new dissection of the superiorior member and to color all anatomical dissection replies accomplished in the medical Faculty. Once colored all these structures, and having the replies in the classroom, was begun the project of recovering for the Fine Arts Faculty a work of art of certain anatomical and pedagogic value: The Crucified skinned of the Doctor Teacher D. Juan Manuel Mi�arro L�pez, belonging to the artistic patrimony of our University, and that previous request to the author and Vicerector, we obtained the authorization to reproduce it. It is widened thus the didactic material initiate in the previous summons, that complements in the Fine Arts Faculty the anatomical comprehension of the live model. They have lent their collaboration in this project new teachers and pupils, to those which as coordinator I want to give the thanks and to devote them my work.
Doctor Teacher Antonio Bautista Dur�n. Seville 1999.
INTRODUCCI�N. JUSTIFICACI�N ART�STICA Y CIENT�FICA A LA 2� FASE.
Ya mencionamos c�mo la tradici�n de las ense�anzas art�sticas en Bellas Artes contemplaban desde siempre el estudio de la representaci�n pl�stica del cuerpo humano, en pr�cticas de Dibujo, Pintura y Modelado de desnudo del natural como referente. Y que pese al distinto valor que la Anatom�a como Ciencia y como Arte ha tenido en cada �poca, �sta pod�a reconocerse por su forma peculiar de representar en los manuales de estudio esa anatom�a corporal, no siempre cont�ndose con los medios directos m�s adecuados, sino m�s bien con limitaciones f�sicas y carencias, que siempre han rodeado al cuerpo humano de versiones e interpretaciones en muchas ocasiones err�neas y falsas.
No vamos a justificar ya m�s la importancia del estudio objetivo estructural de la figura humana en la Universidad, ni el valor de este material did�ctico que desarrollamos para tal fin, porque ya lo hacemos en nuestra docencia, y porque es evidente; pero s� reiteramos que estas asignaturas anat�micas tan trascendentes para el M�dico o para el Artista, no se pueden trabajar imaginando la realidad. Su estudio ya es lo suficientemente enojoso como para soportar por a�adidura las dificultades de imaginaci�n tridimensional, manipulaci�n y conservaci�n del propio material de estudio, y se ha carecido hasta ahora de la ayuda de estas alternativas que suponen las r�plicas para facilitar un acercamiento complementario y as�ptico al estudiante de Bellas Artes, sin impedirle contar con un material did�ctico lleno de rigor y objetividad. No negamos lo imprescindible para el estudiante de Medicina que resulta el contacto directo con el natural y el cad�ver, ni intentamos suplantar a �stos con nuestras r�plicas, pero las preparaciones anat�micas de Medicina resultan caras y escasas para un alumnado numeroso. Es por todo ello por lo que pensamos que se justifica un proyecto como el nuestro que ha intentado superar limitaciones, movido por el inter�s propio de mejorar la ense�anza de nuestro alumnado.
No podr�a resumirse en pocas palabras la impresi�n vivida en el inicio de este proyecto, desde el contacto con la realidad natural, nuestra realidad corporal, hasta la contemplaci�n de la primera r�plica obtenida, y las primeras experiencias docentes que contaron con este tipo de material en el aula: Los artistas, desde los grandes maestros, siempre han sentido curiosidad por el estudio del natural de las estructuras internas del cuerpo humano. En cierta forma yo hab�a recuperado con este proyecto esa tradici�n docente, perdida en Bellas Artes, visitando desde 1992 con mis alumnos la Sala de Disecciones de la Facultad de Medicina de Sevilla (siempre de forma voluntaria y a veces traum�tica para ellos). Pasada la primera impresi�n con el cad�ver, despu�s los alumnos reconoc�an que se pod�an acostumbrar, pero que el olor a formol les molestaba y se met�a en los ojos. Ahora podemos contemplar las r�plicas en nuestra propia Facultad, sin tener que desplazarnos, y con las mismas ventajas visuales y objetivas que supondr�a para un artista ver la disecci�n cadav�rica. Me atrever�a a decir que con mayor ventaja incluso, ya que estas r�plicas las podemos manipular, tocar, mover, repartir, etc.
Lo primero que llam� la atenci�n a los alumnos fue lo diferente que resultaban las disecciones a como ellos las imaginaban. Est�n acostumbrados a la imagen idealizada, limpia y pulcra de los manuales e ilustraciones subjetivas, donde la fibra muscular aparece con un rayado perfecto, como si hubiesen pasado un peine por el m�sculo, cada estructura aparece con un color distinto, y la realidad es otra. La complejidad natural de nuestras estructuras anat�micas es casi infinita, pues todas est�n �ntimamente ligadas, y su separaci�n no resulta sencilla, si no es da�ando alg�n elemento. As� pueden observar que los m�sculos no muestran tanto rayado fibroso, como en los libros, que los vol�menes son m�s reducidos, que el relleno adiposo suaviza los relieves formales, y que en general los manuales son convencionalismos culturales que se van heredando, tom�ndose unos a partir de otros, sin el fundamental contraste con el natural (4). En Bellas Artes el estudio de la Anatom�a Art�stica debe partir tambi�n de un conocimiento objetivo de la realidad, y aunque la finalidad sea aplicarlo a la creatividad, estilo art�stico, o intenciones figurativas, una mala informaci�n de la realidad no mejora los resultados, sino que los hace carecer de l�gica: La creatividad obedece reglas de conocimiento, y el artista debe estar bien informado de la morfolog�a real, para poder luego interpretarla con conocimiento de causa. Esto, que en la actualidad art�stica parece ser como buscar un oasis en el desierto, es lo que realmente nos anima, en el convencimiento de que si no lo defendemos nosotros los profesores, nadie lo har�.
Diferenciamos el concepto de reproducci�n anat�mica con retoque art�stico y escult�rico, donde interviene la subjetividad, de la reproducci�n que intenta reflejar la realidad objetiva, que es lo que desde el inicio hemos denominado r�plica anat�mica (5). Tambi�n mencionamos que las esculturas anat�micas realizadas con un criterio art�stico, son interpretaciones escult�ricas dominadas por la subjetividad del autor. Aunque de indudable valor acad�mico no constituyen un reflejo del natural, y por tanto pueden conducir a errores de ilustraci�n anat�mica que despisten al M�dico, aunque beneficien al artista como idealidad para su interpretaci�n. Esta par�frasis literal de la 1� Fase del curso 1998-99, viene a cuento porque hemos desarrollado en esta segunda fase la recuperaci�n para Bellas Artes de un Modelo Anat�mico (6), el Crucificado desollado de Juan Manuel Mi�arro (ver V�deos que se muestran en la siguiente tabla).
Video 1. Rodrigo Espada me acompa�a al Rectorado para transportar la obra de Mi�arro.
Video 2. Subimos a la Sala de Juntas con una escalera y herramientas.
Video 3. Desmontamos de la cruz la obra y la transportamos a la Facultad de Bellas Artes.
Video 4. Acometo las fases del molde con silicona en mi estudio.
Video 5. Se completa el molde con las cajas de poli�ster y fibra de vidrio.
Video 6. En la clase de procedimientos de Bellas Artes, mis alumnos realizan el vaciado.
Desmontando personalmente el crucificado desollado de D. Juan Manuel Mi�arro, en la Sala de Juntas del Rectorado de la Universidad de Sevilla
Acondicionamiento para realizar el molde al original en mi estudio.
Nuestra innovaci�n metodol�gica ha consistido esta segunda fase en complementar materiales did�cticos mediante la obtenci�n de r�plicas anat�micas del miembro superior, que se une a la del miembro inferior de la 1� Fase, y recuperar para la docencia un modelo anat�mico �nico. Los Ecorch� o desollados anat�micos que empezaron a desarrollarse a partir del Renacimiento son verdaderas lecciones de anatom�a, donde se combinan objetividad y belleza, y cuyo acercamiento art�stico a la realidad los hacen igualmente v�lidos para la docencia.
Ecorch� o desollado del Museo de la Specola de Florencia. De indudable valor cient�fico y art�stico, pero dif�ciles de manipular porque son de cera, este museo florentino dispone de una magn�fica colecci�n de modelos anat�micos humanos y disecaciones zool�gicas, que los alumnos de la Academia de Bellas Artes van a dibujar in situ. Al inter�s anat�mico tiene que sumarse la pr�ctica operativa. De lo contrario har�amos r�plicas para una vitrina o un museo como este, en vez de para su manipulaci�n docente.
Tenemos elaborados hasta la fecha, sumando las actividades del 97/98 con las del curso 98/99/, los siguientes materiales did�cticos:
1. -Molde r�gido en escayola de una cabeza, y mascarilla de barro.
2. -Molde r�gido de escayola de una pierna, y copia superficial.
3.- Molde r�gido de escayola del tejido adiposo de una pierna.
4. -Molde flexible de silicona de una pierna diseccionada, y r�plicas.
5. -Molde flexible de silicona de un brazo diseccionado, y r�plicas.
6.- Modelos anat�micos escult�ricos de El desollado de Houd�n y un Pi� desollado, ambos de la colecci�n de reproducciones de la Academia de San Fernando de Madrid.
7.- Molde de Modelo anat�mico del Crucificado desollado de Juan Manuel Mi�arro.
8.- R�plicas y copias policromadas en poli�ster de todas las figuras mencionadas.
